lunes, 5 de diciembre de 2016

Diciembre 01 de 2016
“Medellín se lució”

La ciudad de Medellín pasó de nuevo a los anales de la historia, sobre todo a los del fútbol mundial  por la apoteósica demostración de ayer en la noche por el sentido de solidaridad ante el dolor que padece el municipio de Chapeco por la trágica muerte  de sus futbolistas locales, periodistas y demás personajes que iban para la ciudad de la eterna primavera a disfrutar la final de la copa suramericana de fútbol, quienes a bordo del avión de la empresa boliviana Lamia con matrícula CP 2933 se precipitaron a tierra en el cerro gordo jurisdicción del municipio de La Unión al oriente de la capital de la montaña  con un total de 71 personas fallecidas y 6 sobrevivientes.
Fue una demostración de apoyo jamás vista a nivel mundial ante un acontecimiento de ésta naturaleza. Antioquia y su capital Medellín se vistieron de blanco níveo que resplandecía en las graderías del estadio  a la luz de las velas que cada paisa alumbró para rendirles tributo a las víctimas de tan absurdo accidente.
Con un lleno total y una muchedumbre incontable  dentro y en los alrededores del estadio, al grito de “Vamos, vamos Chape “Antioquia le rindió un homenaje póstumo al equipo Chapecoense.
71 palomas blancas simbolizando cada una de las almas  fallecidas, volaron al cielo ante la mirada llorosa de los participantes que al unísono musitaban una oración.
Aspecto conmovedor se presentó cuando el Ministro de Relaciones Exteriores  del Brasil José Serra pronunció entre sollozos unas palabras de agradecimiento al pueblo antioqueno quienes tomaron como suya esta tragedia.

A pesar de que nuestro falsario mandatario brilló por su ausencia o pronunciamiento  y los pederastas de la iglesia no se pronunciaros porque andan en otro paseo, Antioquia demostró que no necesita de ningún “servil” para sacar  adelante lo que se propone y ayer como tal, se lució con este homenaje que pasará a la historia. Antioquia ya tiene nuevos hermanos, el pueblo Chapecoense.
Noviembre 15 de 2016

“Que no nos crean tan……..”

Con el respeto que todos me merecen, voy a escribir unas notas con la indignación de adulto mayor acerca de la burla a la que está sometido el pueblo colombiano   por  parte de los facinerosos que están negociando  los acuerdos de Paz.
Voy a  escribir con el realismo mágico de Macondo  con palabras que a muchos no agradan, pero que a otros alegran cuando son manifestadas.
Homologando esa frase popular de “Vuelve el palo y mata al hombre” quiero referirme a los amañados acuerdos que a la verraca nos quieren meter por todos los sentidos el “Cartel de la Paz” quienes con el hiperplásico a la cabeza, no quieren aceptar que el NO ganó el 2 de octubre y que esa decisión soberana de su majestad el pueblo, la vamos a hacer respetar a como dé lugar cueste lo que cueste.
Ya el país está mamado y no les “come cuento” como se dice literalmente a  esa  perorata mentirosa, retórica y componendas que a base de eufemismos escriben y pregonan a los cuatro vientos   los  que siempre salen a hablar por las cadenas televisivas o emisoras al servicio del “patrón”, como nuestro espurio presidente,  el Non Plus Ultra de la verdad,  De la calle,   el zarrapastroso de  Cepeda, el anti cristo ministro del interior,  el paracaidista de Roy Barrera o el “varón” de la voz sutil Benedetti, a los cuales les repetimos para que les quede bien claro: cuando llamaron al pueblo soberano para que aceptara o no los famosos acuerdos pactados entre ambos bandos gobierno y grupo terrorista  de las Farc, dijimos NO aceptar ese esperpento  o mamotreto de 297 páginas porque estaban viciados de corruptela, entreguismo, ítems amañados y favorecedores al enemigo sin ninguna contraprestación,  además porque esos acuerdos, pactos, componendas o llámenlos como quieran, fueron previamente tramados y manipulados durante seis años entre el vendedor de patria De la Calle y sus secuaces, con los ingeniosos de la maldad, las Farc-EP, quienes ahora se creen con autoridad moral y  con dogma de fe para que nosotros los de abajo alias “pueblo” les creamos y aprobemos  a pie juntillas todo lo que allí se pactó.
Que no nos crean aumentados en glándulas seminales, ni estúpidos, que ya estamos muy grandecitos y para eso la experiencia nos ha enseñado, que todo debe ser verificado, si quieres ir bien en la vida, como en este caso, para no captar y digerir esos conejos, sapos  y micos que durante los años anteriores mencionados introdujeron en ítems  y sitios claves de esos famosos acuerdos, difíciles de detectar por la gente del común como la mayoría que esta apostada en el famoso campamento por la Paz en la plaza de Bolívar que como dijo el periodista que se les infiltró, son una manada de desocupados, en donde priman la promiscuidad, el licor y la droga, cuya mayoría  no tenían en donde dormir ni que comer y vieron allí la oportunidad de subsistir, así no sientan lo que dicen o hacen, o por alguna parte de esta juventud que por estar con la cerviz genuflexa ante esos rectángulos  que les envía cada mes la tecnología para que  no levanten la cabeza ni miren alrededor  sobre lo que está aconteciendo a nivel mundial, están con el mejor postor económico que les brinde dinero sin trabajar.
No es que seamos las aves de mal agüero,  los obstaculizadores de la Paz, ni los opositores a este nuevo acuerdo ni a este proceso como nos quieren estigmatizar y que según el caduco  De la Calle quien  con su falsa humildad que no lo caracteriza, dijo aceptando que éste acuerdo si es mejor que el anterior,  pero  ya, analizados  con cabeza fría por peritos y conocedores de la materia, son los mismos  con algunos cambios sustanciales no significativos o mejor dicho, con algunas pinceladas que camuflan lo  anterior no  detectables por la mayoría de estúpidos colombianos.
Ya no son 297 páginas  las que tenemos que leer y auscultar detenidamente para ver en donde está el veneno y la trampa, ahora son 310 páginas, como quien dice “al que no quiere caldo se le dan dos tazas”.
Ya los oigo decir en mi interior: ahí tienen estúpidos para que lean y traten de entender lo que nosotros ya sabemos y no pensamos modificar, amenazándonos  y presionándonos para que los aceptemos como acuerdo final y definitivo  so pena de ser sometidos a la refrendación  por parte de sus camaradas del Congreso que para eso los tienen enmermelados, para que aprueben todo lo que les favorece.
A qué se debe esa prisa en querer que se acepten esos acuerdos como definitivos?
Qué oportuna la enfermedad de nuestro “insigne presidente”, más ahora que se destapa la infiltración del famoso Hacker  en la campaña de Oscar Iván Zuluaga  con la cual se robaron la reelección?
Y qué coincidencia que los involucrados en este en este fraude, son los mismos que tuvieron que ver con el escándalo y degradación del almirante Bachi por el falso montaje que le imputaron?.
Compatriotas la cosa va en serio, tomemos cartas en el asunto que el enemigo no duerme.

“ La verdad es incontrovertible, la malicia la puede atacar, la ignorancia la puede ridiculizar, pero al final ahí está la verdad. (Winston Churchill).