sábado, 20 de octubre de 2012


Octubre14 de 2012


Crónicas leticianas 22

“Lo que la juventud leticiana debe saber

Siguiendo con las crónicas que sobre la ciudad de Leticia, sus aconteceres, personajes, situaciones y hechos históricos he venido escribiendo, artículos  de los cuales tengo noción por experiencia  propia o por intermedio de amigos que me las han contado y que son verídicas porque ellos  también las vivieron y quisieron que las dejara plasmada para la posteridad, la juventud viviente en la región, los cuales deben conocer la realidad de las cosas que allí pasaron y pasan,  y que casi todo el mundo conoce pero que  por x o y motivos les da miedo traer a colación y por ende escribir por ser  temas tabú, porque ocurrieron en la bonanza cocalera, porque tiene que ver con la corrupción y politiquería  reinante en la ciudad o por ser algún otro tema que toca   susceptibilidades pero que de una u otra manera han influido en la decadencia que esta viviendo la región.
Como lo dije anteriormente en otro de mis artículos, todo el mundo piensa que el problema del narcotráfico empezó en Colombia talvez por la costa atlántica en donde la bonanza marimbera hizo su agosto en su época  dejando las mismas  secuelas vividas por el narcotráfico en la zona, pero no fue así.
Fue  Leticia la que desafortunadamente tuvo ese privilegio de ser la ciudad por donde entró ese flagelo a la nación desde el Perú y Bolivia.  Y no fue, como piensan muchos que  Pablo Escobar,  el mexicano, Ledher o los demás capos reconocidos en la región o a nivel nacional, fueron los pioneros de ese negocio en el Amazonas.
Fue para conocimiento de unos y repaso de otros un paisano conocido en la ciudad como “el chico Malo”, nacido en Medellín, criado en la barriada del barrio Manrique y estudiante de la universidad de la vida en las calles  del barrio Guayaquil, antiguo antro bohemio de la capital antioqueña, rebuscador de la vida y vendedor de cuanto articulo  se le apareciera para comercializar, quién llegó a la ciudad en la década de los setenta en donde conoció entre otros negocios,   como químico artesanal que era,   la pasta de coca, compuesto primario en la elaboración del clorhidrato de cocaína y de los beneficios económicos que esta sustancia podía  aportarle si se trabajaba a gran escala.
Desde su base de operaciones un sitio  bar- lenocinio denominado “Los Chicos Malos” comenzó su carrera  y fue por invitación suya que llegaron muchos de los capos a la región a conocer e invertir en este lucrativo negocio convirtiéndolos  posteriormente en los  mundialmente  conocidos comerciantes de la droga.
Fue el pionero en la región  del comercio de la marihuana llegada del interior. Consumo y tráfico que extendió al Perú y al Brasil con su carisma de relacionista público que como mecanismo le funcionó para hacer amigos por todas partes, sobretodo en la ribera del río a los cuales les patrocinó el consumo de la marimba y les enseñó  los procesos de conversión  de la hoja de coca en pasta, hecho que también lo convirtió en el químico pionero en la elaboración de la droga siendo muchos sus discípulos de la región los que se beneficiaron con sus enseñanzas, aparte de ser uno de los iniciadores de trochas y pistas clandestinas en la selva amazónica para evacuarla de la zona luego de su elaboración.
Siempre pasó inadvertido en su clandestina labor, pues al ser poseedor de una calidad humana, con un buen concepto de la  amistad,  un aspecto de persona  madura y seria, todos lo apreciaban desconociendo muchos de ellos su actividad y  los que lo sabían  callaban por  los pagos que recibían por el silencio
Esto lo manifestó en su época la revista brasileña “Manchette” la cual en uno de sus artículos publicó la fama a nivel internacional del  sitio de su  propiedad  en donde al decir de ellos los turistas llegaban allí a  experimentar droga, todo con la anuencia de algunas autoridades las cuales a sabiendas de que el negocio era una realidad no actuaban porque, como lo dije antes, el poder del dinero era mas efectivo y cuando llegaban  a imponer autoridad, eran acallados con la cuota que les habían asignado.
Y fue también él  quien en compañía de otro personaje que a pesar de ser conocido por toda la ciudad también pasó inadvertido. Ni  los mismos amigos íntimos conocieron de  su alianza con uno de los grandes capos de la época pues como asesor y manejador del dinero del emergente, fueron quienes inyectaron el dinero  de las transacciones de la droga al dinero bueno de la gente buena que había en el pueblo y quienes unos inocentes y otros ávidos de dinero fueron los primeros lavadores de activos en la región, dinero que aun circula  en manos de  algunos clanes familiares tradicionales y algunos prestantes comerciantes  que son los que mueven la actividad política corrupta de  la ciudad. 

miércoles, 10 de octubre de 2012





Crónicas leticianas 13…

Acoso, negocio o enfermedad.

Que una persona de edad acose sexualmente a una joven es lo más lógico, pero que una joven  acose a un adulto la cosa es diferente, salvo que el adulto sea  un adonis, posea dinero o tenga dotes de Don Juan.
Pues este fue otro de los casos que me ocurrió en  Leticia, durante mi última estadía de año y medio  en la ciudad.
Tal vez por la  afluencia de las tres culturas que se conjugan es esa frontera es común  que se presente una variedad de acontecimientos  que la hacen una ciudad sui generis Estos sucesos como lo dije anteriormente, pueden ser comunes para sus habitantes por lo habitual de su acontecer, pero para un turista o  recién llegado pueden ser inusuales. Una soleada mañana, entré a la oficina de un amigo con el ánimo de saludarlo, tomarnos un tinto y  charlar con él.
Al entrar, parada en la puerta se encontraba una joven  cuya edad para mi, oscilaba entre los 17 y 18 años, que sin ser una beldad, lucia unos rasgos indígenas atractivos y un buen cuerpo que contrastaba con la minifalda que lucía.
Me senté a platicar con él, observando que la joven permanecía allí parada mirando hacia nosotros con una sonrisa picaresca dibujada en su rostro.
Después de un rato, al ver que aún permanecía allí adosada a la pared sin modular frase alguna, le pregunté a mi amigo  que de quién se trataba y que quería.
Ingiriendo un sorbo de su tinto me contestó:
-Pues esa es una joven  que parece que  tiene su problemita, pero en vez de ser retrasada es como acelerada y lo mas verraco es que le gustan las personas de edad como nosotros,  anda detrás de mí, me espera a la salida, me pone conversación  y  me acompaña hasta la casa, yo la despisto le echo travesías pero siempre se me aparece adelante porque camina más rápido que yo.
No le paró bolas pero ahí sigue detrás de mí hablándome y preguntándome cosas. Es más en estos días que llegue a la casa a almorzar, ella,  aprovechando que no se encontraba  mi esposa, sólo mi hija, se entró con el pretexto de que necesitaba hablar conmigo, cuando entré estaba tomando jugo y charlando con mi hija. Ahí si me asusté pues ya se me había entrado a la casa, con el respeto del caso le dije que abandonara la casa y que no se volviera aparecer por ella, pues no quería problemas con mi señora, pero eso no le valió porque siempre se me aparece por estos lados,
Estábamos en esta conversación cuando noté que ya no estaba parada en la  puerta.
Parece que ya se fue? -Le pregunté a mi amigo-
- Se fue... debe estar afuera esperando que yo salga- me respondió-
Queriendo constatar la veracidad de lo que me dijo me despedí de él.
Salí y me ubique en un sitio estratégico desde donde podía ver  a mi amigo saliendo de su oficina.
Dicho y hecho la joven también estaba ubicada estratégicamente observando lo mismo pero donde yo estaba ella no me veía  pero yo si.
Y preciso cuando  él abandono la oficina y tomo la calle para dirigirse a su casa, ella inmediatamente salió de su acecho y se le pegó al lado a conversarle y así siguieron hasta que doblaron la esquina.  Ahí si me di cuenta de que la chica estaba en lo que estaba.
Pasaron varios días sin volverla a ver, hasta cierta tarde en que  yo me encontraba sólo en mi negocio, cuando ella llegó, la reconocí al instante por su corta y seductora minifalda.
 Entró hasta el fondo,  en donde yo me encontraba.
A la orden  en que le puedo servir? -le pregunté-
Respuesta que me contestó con otra pregunta: Usted es el dueño del negocio?
-Si como no, yo soy el dueño- - me puede regalar un vaso con agua?
-con mucho gusto.-.
Le serví el vaso con agua y continuó con las preguntas.
-Y usted como se llama?
Dándole un nombre diferente al mío, -le respondí Pedro
 Y continuó con su interrogatorio ya preguntándome con el nombre falso que le di.
- y don Pedro usted no necesita  quien le colabore en el negocio o alguien que le asee el apartamento-
-No señorita muchas gracias, por ahora no necesito a nadie para esos menesteres - le respondí-
 Terminándose el vaso con agua me dijo: A listo por aquí seguiré pasando  por si algún día me necesita- y despidiéndose dirigió a la puerta.
Al llegar exactamente a la salida, dejó caer un papel que llevaba en la mano y al agacharse de una manera sugestiva, me exhibió su tanga brasilera.
Al observar esta provocación pensé para mis adentros “este huevo quiere sal”. Ella después de enderezarse, volteándose risueña  se retiró.
 Las cosas no pasaron a más.
Pasaron varios días cuando regresó de nuevo, notando que siempre llegaba cuando estaba solo y   su disculpa era el vaso con agua.
En esta oportunidad el del interrogatorio fui yo quien le preguntó que si estudiaba y que cuantos años tenía.
Me contestó que no estudiaba y que tenía 20 años.
-No te creo la edad -le contesté-
- deje y verá que la próxima vez le traigo la contraseña de la cédula para que me crea, y vea aquí le dejo este papelito, el cual ya estaba previamente escrito con su nombre y su celular, por si necesita quien le colabore  o le asee el apartamento volvió a repetirme y entregándomelo se retiró contorneándose cadenciosamente.
Ya estas visitas no me estaban gustando para nada  y a sabiendas de como son las cosas en ese pueblo, podía suceder que la gente al verla salir de mi negocio, hicieran un montaje en mi contra pues a lo mejor ella y mucha gente que no me conocía pensaban que yo era nuevo en el pueblo y que desconocía de esa estrategia  pues por su plan de  conquista  e  insinuaciones, para un novato, es la forma mas sencilla para caer.
Al otro día le comenté a unas amigas y a mi amigo sobre las visitas constantes de la joven el cual me aconsejó: Pilas marica, que el papá de ella es mala gente y muy jodido, no vaya a dar papaya.
-tranquilo viejo que ya sé como es la cosa-
Esa misma tarde llamé a mi esposa a comentarle la situación, la cual me dijo: Pilas pues, menos mal que ya usted tiene experiencia  y sabe como funcionan las mujeres en esa tierra-
-tranquila mija que si no caí cuando era soltero y  joven, ahora menos.
 En otra ocasión, como de costumbre abrí  el negocio y estaba afuera barriendo cuando apareció,  me saludo muy efusiva, -don Pedro como le va- y se dirigió al interior del establecimiento, yo me fui de tras de ella preguntándole. Cuénteme en que le puedo servir? Mire don Pedro aquí esta la contraseña de mi cédula para que vea mi edad.
-Y cual es su interés en que yo conozca su edad le pregunté-
- Ah como usted me dijo que yo era menor de edad entonces vea que no es  así.
Tomando la contraseña en mis manos, pude observar que en realidad si tenía 20  años lo que me daba a entender que tenía la vía libre para cualquier relación y por lo menos tenía la edad para no  ser acusado por violación a menor, como es la costumbre, ya que a veces a pesar de ser menores de edad, ciertas jóvenes  practican la profesión desde temprana edad y hacen caer al mas avezado  conquistador.
Iba  como siempre con su insinuadora minifalda, pero a esto le agregó una camiseta apretada al cuerpo sobre la cual dejaba ver, al no llevar sostenes puestos, la turgencia de sus senos.
 Ese día parece que iba dispuesta a todo, pues me solicitó que si le regalaba una cerveza. Pensé en negársela, pero me dije, vamos a ver hasta donde llega esta situación.
Tomó un sorbo de  la cerveza y preguntó de nuevo: don Pedro usted vive aquí.
Si señorita yo vivo aquí  y ahí adentro tengo mi apartamento.
-Puedo mirar? Me dijo maliciosamente.
_ no, no puede entrar, - le contesté- que tal que alguien la vea saliendo de ahí adentro, me meto en un problema con su papá.
Como noté que la cosa se estaban tornando delicada y ella estaba empecinada que la invitara a conocer el apartamento, para quitármela de encima le dije en tono fuerte:
Sabe qué, si su papá no fuera tan mala gente y tan jodido, hace tiempo ya la hubiera tirado en la cama que tengo adentro--
Sonriendo me contestó: -tranquilo que mi papá no es tan bravo como dicen-
Invitándola a que saliera del negocio le complementé la despedida con esta información: - le pido un favor, no vuelva aparecer por  estos lados que mi esposa  llega esta semana y  se queda a vivir conmigo  y además es muy celosa y no quiero problemas, ni con ella ni con usted.
Afortunadamente como que se dio cuenta que conmigo las cosas no eran fáciles y no volvió a visitarme, pero siempre que pasaba por el frente paraba  y maliciosamente me sonreía.

sábado, 6 de octubre de 2012


  Octubre 06 de 2012


Crónicas Leticianas 21

“Y no es terrorismo turístico”

Con el debido respeto, a su majestad el famoso Río Amazonas.
Primero que todo no quiero con este escrito,  crear polémica, ni ser juzgado como terrorista turístico como le ocurrió a mi amigo Fabio Dickson  quien como guía de turismo en épocas anteriores y gran conocedor del  río escribió hace varios años  un artículo en donde  a modo de recomendaciones  describía también algunos de los peligros del río amazonas,  artículo por el cual fue criticado como ocurre casi siempre cuando se escribe sobre las verdades  que ocurren en ese departamento.
Por esa razón aclaro que no estoy  haciendo mala propaganda turística ni al río ni al Amazonas, lo que quiero es detallar ciertos peligros latentes que tanto el río Amazonas, como los lagos, y sus ríos tributarios conllevan en su caudal o en lo profundo de sus aguas y que debido  a que algunos guías muy deportivamente permiten el baño de turistas  en esas aguas, no les advierten los peligros que puede conllevar esa experiencia..
Antiguamente cuando los paseos dominicales a baño era a los lagos y mas exactamente a la bocatoma del acueducto en el kmt 6, se presentaron varios casos  de personas ahogadas debido al toque de un temblón o anguila, pez morador  de esas aguas, alargado con dimensiones hasta de dos metros que produce descargas eléctricas desde 10  hasta 600 voltios con los cuales paraliza a la víctima  lo que le impide nadar  muriendo por inmersión. Sin embargo la gente continuó bañándose en esas aguas con las precauciones necesarias.
Otro pez diminuto que es un peligro para los bañistas es el llamado “carnero” en español y “candirú” en portugués conocido en el amazonas como el “pez vampiro”  por ser hematófago, es decir que se alimenta de sangre, razón por la cual se introduce en las agallas de los peces grandes en donde se alimentan de su sangre. Por esto no es aconsejable que una mujer con la  menstruación se bañe en las aguas en donde habita este siluro so riesgo que este diminuto pez se le introduzca en la vagina. Para los hombres  el peligro radica en que la persona  al miccionarse en el agua el pez es posiblemente atraído por alguna sustancia úrica de la orina introduciéndosele por la uretra.
En el caso de los hombres, cuando esto ocurre, debido a dos púas que tiene a nivel de la cabeza con las  cuales se adhiere al conducto urinario, su extracción es muy complicada   lo cual puede producir hasta hemorragia interna, habiendo que recurrir muchas veces  sobre todo en los sitios lejanos para salvarse, hasta la cercenación del miembro viril. Afortunadamente parece que la combinación de Uito con limón en agua caliente tomado en forma de te utilizado por ciertos indígenas, produce el ablandamiento y desintegración del pez el cual se expulsa con la orina.
Otro de los enemigos acuáticos son  las pirañas, de las cuales las más  agresivas son las que quedan retenidas en los lagos cuando el río baja, pues debido a la falta de alimento, todo lo que caiga al agua es considerado como comida.
De ahí que antiguamente las pescábamos con un hilo o pedazo de tela roja pegada a un anzuelo. De estas la más peligrosa es la piraña negra que se pesca mas abajo de Manaos las cuales pueden tener de 2 o 3 libras de peso.
Otra gran enemiga  cuando baja el río y deja playas, es la “raya” la cual se camufla en la orilla pantanosa. Al ser pisada por una persona reacciona introduciendo la punta urticante de su cola en las extremidades inferiores del intruso produciéndole un gran dolor.
Y que decir de las grandes especies que también habitan el río, como una “boa constrictor”, reptil de más de tres metros de longitud la cual aunque no es frecuente, si esporádicamente se desplaza y es vista en los caños, lagos  y afluentes.
Y que decir de las babillas que se cazan nocturnamente en los lagos.
Y para terminar  la famosa “pirahiba” pez de gran tamaño que puede alcanzar un peso de 180 kilos en su estado adulto y aunque no presenta voracidad , en su estado de inanición puede tragarse un niño o un adulto como el caso ocurrido con el soldado que se cayó  de un remolcador viajando de Puerto Asis a Leticia, cuando al inclinarse  a tratar de sacar agua del río  con una totuma, fue jalado por la corriente  encontrándose a los pocos días en la boca de un pez de esta magnitud que se atragantó con él pereciendo cerca de una playa, solo se observaban las botas que sobresalían de su boca.
Aunque estos casos no son frecuentes, si han sucedido en el área, sobre todo en las aguas  del Amazonas abajo de Manaos, en los afluentes o en los igarapés que este majestuoso río posee.
.