febrero 08 de 2018

Crónicas leticianas

“Carta abierta al señor alcalde de la ciudad de Leticia señor José Araujo Nieto”

Respetado señor: un cordial saludo de su copartidario y amigo deseándole desde la distancia muchos éxitos en su gestión.

Como doliente de esa región a la cual solo tengo deuda de gratitud por la experiencia, familia y bienestar adquirido durante los años que estuve haciendo patria gratis en esa región, con los recursos que tuve al alcance en las diferentes instituciones a las cuales tuve el honor de pertenecer, aportando desde allí mi granito de arena en la solución de algunos problemas que nos aquejaban para la época en donde las uñas, eran nuestras herramientas de trabajo.

Por eso, me duele que aún, después de más de  cuarenta años la corrupción, la desidia, la falta de pertenencia, la ingobernabilidad, y la falta de autoridad, entre otras, siguen siendo el pan de cada día sin que nadie  se apersone en tratar ve tomar cartas en el asunto sobre  estas anomalías que vienen dando al traste con la economía, la salud, la educación y la buena calidad de vida de los leticianos.

Como nos sentíamos de orgullosos cuando se hablaba de Leticia  capital ecológica y pulmón del mundo además de ciudad turística por excelencia calificativos que tuvieron su significación en años anteriores pero que hoy por hoy, solo queda el buen recuerdo que catapultó la ciudad que aún sigue atrayendo turistas en algunos casos en forma engañosa, y todo por la intransigencia de algunos gobernantes  e inescrupulosos del mismo pueblo que no quiere abandonar su zona de confort permitiendo, con intereses a favor, que otros hagan y deshagan con su anuencia y para no ir muy lejos, el robo del presupuesto, el caso de las basuras, el problema del agua potable,  las fallas en el sistema eléctrico y otros adminículos que enunciándolos por escrito, darían para escribir un betseller.

Hoy que me encuentro viviendo de nuevo en la innovadora ciudad de Medellín, en donde en mi trajinar diario por calles, avenidas y barrios veo  el esfuerzo de sus gobernantes y ciudadanía en general en no dejar caer la famosa “cultura metro” que tantos beneficios nos ha traído en la ciudad. Por eso quiero señor Alcalde, por medio de la presente  invitarlo a que se eche una rodadita con sus asesores por esta ciudad para que vean en vivo y en directo como la innovación y el modernismo trazan cada día obras importantes programadas con visión futurista eficientes y amigables con el medio ambiente como por ejemplo “el sistema de bicicletas públicas” el cual le caería muy bien a ese pulmón del mundo contaminado por la polución de tantos vehículos automotores que hacen su agosto en la región con la anuencia de autoridades  e instituciones que supuestamente velan por la protección del ecosistema.

Es hora señor alcalde de frenar y poner control a ese modernismo automotor perjudicial para ese oasis de oxígeno llamado Amazonas, antes de que sea demasiado tarde, como se viene vislumbrando a pasos agigantados,  y en donde ustedes como gobernantes deben frenar ese “paternalismo delicioso” que en aras de tener popularidad y votos está acabando con la región.

Es hora señor alcalde de aplicar “mano dura” para tratar de parar esos fenómenos de contaminación, aplicando los correctivos necesarios con sanciones pecuniarias  autorizadas por los códigos para subsanar las contravenciones repetitivas que se presentan a diario  contra la buena marcha de la ciudad, tales como las basuras, la contaminación auditiva, la  falta de pertenencia entre otras  situaciones que ya hicieron metástasis, sin que nadie se dé por aludido.

“La letra con sangre entra” como decíamos antiguamente y por esta aseveración ya han de salir  los detractores, aquellos que “ni rajan ,ni prestan el hacha”, a tildarme de retrógrado, cavernícola y cosas por el estilo, que les duelen cuando se les dice la verdad, pero hay que hacerlo señor Alcalde métale la mano a los bolsillos a los infractores y se dará cuenta que cuando a un personaje se le toca el bolsillo por alguna contravención, ya lo piensa dos veces para volver a cometerla.

Señor Alcalde, no eche en saco roto la invitación que yo sé que este sistema de las bicicletas publicas aplicado a esa región favorecerá primero que todo la salud de los pobladores, ayudará a rebajar el índice de contaminación y facilitara el traslado de turistas y regionales haciendo un sistema eficiente  y amigable  con el medio ambiente en donde usted como autoridad pasará a la historia por el bien que le hace a la región, al ecosistema y al mundo quienes  en un futuro se lo agradecerán.